domingo, 18 de marzo de 2012

Océanos, desiertos y montañas


Sería un estúpido error pensar que uno tiene ya controlada su área de interés. Lo que acertadamente viene a llamarse, el oficio. Como me dice un gran amigo no médico: al final, el médico que vale es aquel que sabe solucionar lo más frecuente. Mi amigo, que suele acertar en general, tiene razón con pocos matices que añadir. 

Sin embargo, sin ánimo de ser quisquilloso, esta entrada viene motivada por uno de esos matices al certero consejo. Ahí voy. Queramos o no cuando llevamos haciendo algo el suficiente tiempo, llegara el día en que su automatización, la experiencia acumulada u otros factores convertirán nuestros actos en algo cada vez menos valioso, que maquinas, personal menos cualificado o el propio paciente podrá hacer por nosotros. Desde ese momento, al menos en mi opinión, deberíamos comenzar a sentir algo parecido a remordimiento: si el porcentaje de tiempo que empleamos en hacer algo que otra persona más apropiada o uno mismo en mucho menos tiempo podría hacer aumenta; estamos perdiendo un tiempo precioso para otra cosa.

Con esta excusa de ansiar ir siempre un poco más lejos, a riesgo de errar, tambalear los cimientos o encontrar el propio límite comparto con vosotros el "abstract" que nos acaban de aceptar en el EUROSON 2012 (Congreso Europeo de Ecografía): "Telesonography: by ocenas, deserts and mountains". Que era tan fascinante vivimos...

Feliz Domingo.