viernes, 1 de enero de 2010

Aprendiendo a ritmo marcial


A veces cuesta ser original y la carretera se hace confusa y llena de curvas. Es el momento de volver al principio y agarrarnos con fuerza a lo que sabemos seguro que funciona: Volver a las raíces.
No soy aficionado a la música clásica pero no creo que haya muchas maneras mejores de empezar el año que escuchando la marcha Radetzky de Johann Strauss.
Como propósito sencillo del año nuevo no me parece mala idea sacar un rato y hacer alguno de los cursos que ofrece el portal Univadis sobre exploración e infiltraciones que ya recomendaba el Dr. Capa en su blog
Cuando el trabajo nos haga disfrutar tanto como escuchar la marcha Radetzky en el concierto de Año Nuevo seguro que se despeja el camino. Podremos, entonces, pensar en ir siempre un poco más lejos.
Feliz año y mucho ánimo a todos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Amigo, estamos a 19 de enero... qué pasa con la rehabilitación.
Un saludo y feliz año nuevo.
F.Urquijo